Jose Ramón Cuellar es el dueño del café «La Yerbabuena», una empresa que desde hace varios años se ha dedicado al cultivo y venta de un delicioso café el famoso en todo el Pueblo Mágico de Comala, y es tanto su éxito que turistas de todo el mundo han ido a probar sus delicioso producto.
Luego de escuchar todas estas historias de este delicioso café en Maleta de Viajes no nos pudimos resistir y acudimos gracias a la agencia Travesías Comala, a conocer a este emprendedor y por qué no disfrutar de su riquisimo producto.
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En entrevista para Maleta de Viajes, José Ramón nos contó que este negocio de cultivo de café viene de al menos dos generaciones atrás de él y que ahora es su turno para seguir poniendo en alto el nombre de su familia.
«Comercialmente voy para 8 años, pero procesando café tenemos desde el 64, empezó mi abuelo con la plantación, luego mi padre y bueno ahora me toca seguir la plantación a mí», dijo José Ramón.
El dueño del café La Yerbabuena nos contó como es el proceso para elabora su café, el cual por cierto, a diferencia de otras empresas de la zona, se hace de manera tradicional desde el cultivo hasta la venta del mismo.
«La planta madura a partir de diciembre y hasta abril que son los meses de cosecha de esta región, cuando está rojo se corta y se pone al sol, nosotros hacemos el proceso natural y lo ponemos 15 día a que se deshidrate, luego separamos la cáscara de la semilla, este proceso es algo mecánico, una vez separada se clasifica por tamaños y calidades.Ya que separamos los granos se tuesta por separado en un horno a la leña y se meten las charolas con café».
Luego de escuchar su historia no pudimos con la tentación y probamos el café que elaboran, el cual nos comentó José Ramón es una recete antogua que él recuperó de su abuelo.
«La receta es un poco antigua, la verdad es desde mi abuelo pero desconozco si el la adquirió de antes, pero se perdió un poco, hasta que me di ala tarea de buscar y encontrar la receta original que tiene cerca de 50 años».
Finalmente José Ramón nos dijo que seguir con este negocio lo hace sentirse orgulloso de su familia y de las tradiciones que tienen en la zona y busca que esta bella industria continúe por muchas generaciones más.
«Es bonito conservar algo con lo que empezó a trabajar mi familia que es el café , es importante conservar esa tradición que inició mi abuelo y seguirlo ahora yo , lo hacemos para que la gente tome café como a nosotros nos gusta tomarlo».
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