La celebración de la fiesta del Día de la Candelaria tiene su origen en la religión cristiana o católica cómo recuerdo en recuerdo al pasaje bíblico de la Presentación del Niño Jesús en el Templo de Jerusalén.
Se celebra el 2 de febrero, poco menos de un mes después del día de reyes donde, según la tradición, las personas que al partir y degustar la rosca de reyes tuvieron la buena (o mala) fortuna de sacar un muñeco de niño dios, este día tienen que comprar tamales para sus acompañantes en la partida de rosca.
No es sorpresa que en esta festividad se incremente la venta de tamales y a pesar de los tradicionales de verde, mole, dulce y rajas que podemos encontrar en los puestos, existen también ofertas diferentes de sabores de este tradicional manjar.
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Tamales de Huitlacoche en Molino el Pujol
La tortillería/antojería fundada por el reconocido chef Enrique Olvera pone a la venta en estas fechas sus tamales de huitlacoche y chepil (o chipilin) inspirados en la cocina tradicional oaxaqueña y chiapaneca. La combinación de la masa hecha de maíces nativos e insumos de alta calidad le dan un gran sabor a esta propuesta gastronómica.
Puedes encontrarlos en Gral. Benjamín Hill 146, en la colonia Hipódromo Condesa en la Ciudad de México.
Foto: Molino Pujol
Tamal de nuez, acompañado de natilla de cajeta de Tamales Madre
Tamales Madre es un referente en la cocina mexicana, especializados y enfocados en la elaboración de tamales con maíces de Tlaxcala, Milpa Alta y Oaxaca puedes encontrar diferentes propuestas y sabores cómo tamales de nuez, mole con plátano macho y caldillo de frijol, así como de huauzontle con requesón y salsa de pasilla, todo con ingredientes 100 por ciento mexicanos.
Puedes ir a probarlos en Liverpool 44a, en la colonia Juárez al centro de la CDMX.
Foto: Tamales Madre
Tamales de Chipilin Chiapanecos
Si estás de viaje por Tuxtla Gutiérrez (te recomiendo que vayas esta época), puedes probar en cualquier puesto en algún esquina los famosos tamales de Chipilin (o chepil) en hoja de plátano acompañados de pollo, carne de cerdo o así solos. El chipilin le da un sabor muy característico a toda la masa y cuando das el primer bocado puedes sentir una explosión de sabor en tu paladar.
Puedes encontrarlo en casi cualquier puesto de tamales de Tuxtla gutierrez, Chiapas.
Foto: Maleta de Viajes
Tamales de camarón o de queso mozarella del Monasterio.
No es que los preparen curas, aunque parecen hechos por ángeles. Preparados con ingredientes de alta calidad, este restaurante ubicado al sur de la Ciudad de México además de ofrecer los tamales clásicos puede darte de camarones, epazote, chile poblano, calabaza, etc. Ir es una experiencia que no te puedes perder.
Puedes ir a degustarlos en Corina 117, en la colonía del carmen en Coyoacan, CDMX.
Foto: Tamalama
¿Quieres hacer un tour y visitar todas estas y más propuestas de tamales? Te comparto mi lista de Google maps con los mejores tamales.
